Una de las patologías que son atendidas con frecuencia en nuestra Unidad de Vértigo y equilibrio es la Enfermedad o Síndrome de Ménière.
¿Qué es el Síndrome de Ménière?
Se trata de una afectación del oído interno que produce clínica de tipo vertiginoso asociando sintomatología ótica (sordera que suele ser variable, acúfenos o tinnitus y sensación de plenitud del oído) .
Puede producirse en cualquier edad, aunque es muy frecuente en edades medias y es de carácter crónico, pero con tratamientos adecuados permite un control de la sintomatología.
Generalmente suele afectar a un solo oído, aunque se pueden constatar casos bilaterales en contadas ocasiones.
¿Qué síntomas presenta el Síndrome de Ménière?
La sintomatología característica de esta enfermedad es:
Cuadros de tipo vertiginoso con clínica rotatoria, generalmente de unas horas de duración, que aparecen de repente (a veces existe una premonición de que va a comenzar el cuadro) y que se suelen acompañar de nauseas, vómitos y escalofríos. Son episodios muy invalidantes que impiden una vida normal en el paciente. Estos cuadros habitualmente ceden en el transcurso de unas horas dejando paso a una sensación de inestabilidad que se puede prolongar durante días.
Aunque los cuadros vertiginosos son lo que más molesta a los pacientes y el motivo principal de consulta, se acompañan también de aparición de acúfenos (ruidos en el interior del oído o dentro de la cabeza) que suelen aumentar durante las crisis de vértigo, así como sensación de plenitud de alguno de los oídos.
La enfermedad cursa con una sordera asociada, que es variable al principio pero suele estabilizarse con el progreso de la enfermedad.
La causa de la enfermedad es desconocida pero los síntomas se producen por un aumento del contenido y presión de un líquido que irriga el oído interno denominado endolinfa.
Diagnóstico y tratamiento del Síndrome de Ménière
En cuanto al diagnóstico de la citada patología se basará especialmente en una historia clínica detallada y una exploración vestibular concienzuda que nos orienten sobre la posibilidad de padecer este síndrome. Solo entonces toma relevancia la realización de pruebas más sofisticadas que disponemos en nuestra Unidad para corroborar el diagnóstico y cuantificar, en su caso, el alcance de las lesiones.
Se puede realizar pruebas como el V-hit , Posturografía dinámica con realidad virtual o el estudio mediante pruebas calóricas que podría ser la prueba más concluyente . Se realizará estudio audiométrico para control de la hipoacusia acompañante.
En cuanto al tratamiento, va a depender en gran medida del grado de afectación, pudiéndose orientar al paciente sobre medidas higiénico-dietéticas para evitar las crisis frecuentes de vértigo y la inestabilidad entre crisis, optando por una dieta baja en sal, control de las horas de sueño, evitar situaciones de stress, etc.